Eva, de Bake-Street, lo tiene claro: “Siempre me han gustado los formatos pequeños e individuales para presentar dulces; resultan muy atractivos y cómodos a la hora de servir. Como estas tartaletas de avena Quaker y coco con panna cotta de grosellas. Una receta muy fácil de preparar y sin necesidad de encender el horno, ¡no os podréis resistir a probarlas!”
Con una base elaborada con copos de avena, coco rallado y un poco de leche condensada que nos ayudará a amalgamar los ingredientes aportando un punto dulce. Tan sencillo como mezclar, rellenar los moldes y llevar al frío un rato. La panna cotta, que seguro ya conocéis, es ligera, suave y con un sabor inconfundible. En esta ocasión, la elaboraremos con zumo natural de grosellas, crema de coco y muy poca cantidad de azúcar.
Para presentar las tartaletas hemos elegido grosellas y flores comestibles, aunque siempre puedes decorarlas al gusto, sustituyendo las flores por frutos rojos, por ejemplo.
¿Se os ocurre un desayuno más delicioso para comenzar hoy el día? 😉